Bienvenidos

¡Buenos días, tardes o noches a todos! Iniciamos este blog con mucha ilusión, esperando que os guste y podamos aprender todos sobre este mundillo que nos emociona: el Big Data en el mundo del fútbol. Como apasionados que somos del fútbol, contaremos historias de fichajes, equipos, mercado de jugadores… basándonos en información objetiva. Siendo como somos entusiastas de los datos, hablaremos de tecnología, metodologías, herramientas, inteligencia artificial… desde la perspectiva futbolística.  Para todo ello, contaremos con los mejores colaboradores y especialistas posibles. Pronto los conoceréis.

¡Empezamos! Y no podía ser de otra manera, intentando explicar el sentido del Big Data en la industria del deporte rey. El sector del fútbol es el último invitado en llegar a una fiesta que lleva tiempo celebrándose. Y cuando llegas tarde a una fiesta intentas aprovechar el tiempo perdido, poniéndote en sintonía con el resto de invitados. Mercados como el de la banca, retail, aseguradoras, telecos, etc, llevan años de trabajo y experiencia en tecnologías de tratamiento de datos. Han pasado por un largo y arduo proceso de transformación tecnológica y digital. El fútbol ha llegado con la mesa puesta y bufé libre, lo difícil es elegir bien.

Todos estos sectores ya dan por hecho que, prácticamente todas sus acciones están justificadas en conclusiones basadas en datos. Cuando el análisis de los datos se convierte en estrategia dentro de una empresa, se dice que la empresa es una empresa Data Driven. Es hora de que el fútbol inicie este camino.

Qué hay detrás de "Big data"

Tras las simples palabras Big Data realmente se esconde un conjunto de tecnologías que pueden ser de todo menos sencillas de entender. Big data, sobre todo en el fútbol, es un eufemismo muy utilizado erróneamente para simplificar o endulzar otros términos menos amigables como bases de datos distribuidas, algoritmos matemáticos o aprendizaje automático. Al fin y el cabo, es un término que resume todas las tecnologías, disciplinas y herramientas que tienen que ver con la extracción, el tratamiento, explotación e interpretación de los datos.

Cuando se habla de Big Data se meten en el saco muchas otras cosas que, técnicamente, no se pueden considerar Big Data. Cuando se habla de este término, realmente se está hablando de muchos otros: Inteligencia de Negocio, Computación en la Nube o Inteligencia Artificial pueden ser algunos ejemplos. No es solo una cuestión de volumen. Son términos muy relacionados dentro del ecosistema del análisis de datos, pero es bueno saber diferenciarlos.

Los actores del mercado, clubs, directores deportivos, entrenadores, analistas, han recibido con entusiasmo esta nueva ola tecnológica, pero a veces este entusiasmo pronto se convierte en escepticismo, ¿las razones?. Creemos que son principalmente dos, no exclusivas del fútbol:

1. El siempre presente miedo al cambio. Es una tónica general en muchos ámbitos de la vida, ver los cambios que se avecinan como una amenaza al statu quo. La tecnología no viene a cambiar o quitar personas, no anula cualquier conocimiento adquirido, no destruye lo construido. Pero, en cierto modo, hace falta tener un poco de humildad y altura de miras para asumir este cambio y saber que el cambio será profundo.
2. La avalancha de conceptos. El fútbol sigue teniendo una filosofía de mercado tradicional, muy enfocado a la esencia de su existencia, la pelota. Es incapaz de asumir y asimilar al mismo tiempo este tsunami de cambios tecnológicos. Tiene la ventaja de tener la mesa servida, la tecnología está madura, pero la adaptación es compleja.

Un cambio profundo

Los clubs de fútbol, los distintos actores, tienen que asumir que, si quieren competir, este cambio no es una opción, es una obligación. Es un cambio que impacta en todas las facetas del club y que, por lo tanto, es un cambio estructural que se tiene que quedar dentro del club. Es importante entender que no solo se trata de adquirir una o dos herramientas de software. Es un cambio profundo que implica cambios en la cultura de trabajo, en su organigrama, en sus recursos técnicos pero, sobre todo, humanos, en su formación y en la obtención de talento.

Las mejoras de esta tecnología son evidentes (en otro artículo las desarrollaremos) pero los casos de uso no están tan claros. No hay duda de los beneficios que se pueden conseguir tomando decisiones basadas en datos, los podemos resumir en: optimización de ingresos, mayor productividad y minimización del riesgo. Los aplicativos principalmente van enfocados a la parcela de scouting y analítica de juego pero el abanico puede ser mucho mas amplio: rendimiento físico, marketing, ventas, fidelización del socio, e-commerce, ingresos, etc. todo esto da a entender la transversalidad y la amplitud que tiene implantar esta nueva forma de trabajar. Será un gran acierto planificar el desarrollo de esta tecnología teniendo en cuenta el alcance que puede tener.

Para lo bueno o para lo malo, hace tiempo que el futbol se ha convertido en negocio, el club en empresa y  los datos en materia prima. El club que empiece a entender estos cambios en este nuevo escenario, a comportarse como una empresa talentosa e innovadora, tendrá muchos puntos ganados y entrará en otra liga, una liga de equipos ganadores. La apuesta por los datos será el fichaje mas importante de la próxima década. ¡Un fichaje al alcance de todos!